Entre abril y mayo

Entre abril y mayo.



Cuando empieza mejor tiempo, tenemos un poco de techo y el pavimento caliente por el sol. Puedes comer al aire libre aunque lejos tengan nieve los montes. Aquí los aldeanos dicen algo parecido a esto, (que yo no me lo se bien):

Marzo "Ñeril" (de los nidos)
Abril "Güeveril" (de los huevos)
Mayo"Pajaril" (de los pájaros nuevos)

Cuando muere abril, puedes comer fuera sin sentir frío y gorriones hay muchos desplegando actividad de vuelo; posarse, reposarse y hacer ruido. Les disparo pequeñas migas de pan y las toman casi al aire. Pero no se acercan.

A los dos días, aunque las arroje más cerca, tienen el valor temeroso, de tomarlas y huir corriendo (quiero decir volando) con ellas hacia el nido...
Incluso al lado de la silla, si haces que no los miras.. se acercan a por la miga.

Pero ¡AH! el día que después te olvidas de migas, hablando o distraído y de pronto te asusta el gran silbido... y miras cerca del bordillo sobre la piedra. Tieso y firme como un soldado y con el pecho fuera... El gorrión dice ¡Que pasa hoy... muchacho! ..¡No ves que estoy aquí!... Y no te asusta pero no tienes más remedio que rendir migas.

Pero si no les tiro migas o me muero, no necesitan para nada esas migas para seguir viviendo. Yo, aunque tampoco necesito tirarlas; me gusta hacerlo sabiendo que ellos no necesitan mis migas, simplemente les agrada tomarlas todas y sobre todo las que estén más cerca del nido.. pues son como todo el universo económicos y saben que las estaciones no esperan...

Mientras yo juego tirando migas y ellos me entretienen: se alimentan, alimentan y realizan su labor más importante.

jose francisco

Que original prosa, es muy entretenida y también poética. A mi me encanta tirar migas, es sentir vida en esas avecillas que las cogen.
Buenísimo aporte, gracias José Francisco.
Mi afecto.

sabra